miércoles, 21 de septiembre de 2011

Importancia de la lectura



"De los diversos instrumentos inventados por el hombre, el más asombroso es el libro; todos los demás son extensiones de su cuerpo...Sólo el libro es una extensión de la imaginación y la memoria." Jorge Luis Borges.

La lectura es el camino hacia el conocimiento y la libertad. Ella nos permite viajar por los caminos del tiempo y del espacio, y conocer la vida, el ambiente, las costumbres, el pensamiento y las creaciones de los grandes hombres que han hecho y hacen la historia.

La lectura implica la participación activa de la mente y contribuye al desarrollo de la imaginación, la creatividad, enriquece el vocabulario como la expresión oral y escrita.

Desde el punto de vista psicológico ayuda a comprender mejor el mundo como a nosotros mismos, facilita las relaciones interpersonales, su desarrollo afectivo, moral y espiritual y en consecuencia, la capacidad para construir un mundo más justo y más humano.

La lectura tiene una gran importancia en el proceso de desarrollo y maduración de los niños. Desde hace unos años se está notando un creciente interés de los padres por la lectura de sus hijos, quizá porque saben la relación que existe entre lectura y rendimiento escolar.

Con la proliferación de información audiovisual, parece que la lectura va quedando en un segundo plano, así en los últimos años podemos observar como los niños leen cada vez menos y de una forma muy poco comprensiva. El vocabulario que manejan es cada día más escaso y pobre y es alarmante la disminución de la capacidad de comprensión lectora, que se observa en los jóvenes actuales provocada, entre otras causas, por la irrupción en nuestra sociedad de toda clase de medios audiovisuales, que compiten feroz y despiadadamente, con el tiempo de lectura de nuestros alumnos. Este es un gravísimo problema que soportan actualmente, sin excepción todos los países desarrollados o en vías de desarrollo.

Para desarrollar la lectura comprensiva es aconsejable:
• Leer periódicamente libros de estudio como de literatura, revistas o diarios
• Adquirir más vocabulario, ayudándose para ello con el diccionario (la misma lectura nutre de conceptos al lector sin que éste se dé cuenta de ello)
• Ejercitar el pensamiento lógico, ya sea mediante el estudio de la Lógica o la Matemática, los juegos de ingenio o la práctica del ajedrez
• Ampliar la propia cultura general adquiriendo un conocimiento básico suficiente sobre la Historia y sus etapas, sobre la geografía del propio país y del mundo, sobre las distintas ideas políticas y religiosas, etc.
• Desarrollar el espíritu crítico definiendo la propia escala de valores y juzgando desde ella las afirmaciones de terceros.

La lectura ayuda al desarrollo y perfeccionamiento del lenguaje. Mejora la expresión oral y escrita y hace el lenguaje más fluido. Aumenta el vocabulario y mejora la ortografía. Hay muchas razones para reflejar la importancia de la lectura:

• La lectura mejora las relaciones humanas, enriqueciendo los contactos personales.
• La lectura da facilidad para exponer el propio pensamiento y posibilita la capacidad de pensar.
• La lectura es una herramienta extraordinaria de trabajo intelectual ya que pone en acción las funciones mentales agilizando la inteligencia. Por eso tiene relación con el rendimiento escolar.
• La lectura aumenta el bagaje cultural; proporciona información, conocimientos. Cuando se lee se aprende.
• La lectura amplía los horizontes del individuo permitiéndole ponerse en contacto con lugares, gentes y costumbres lejanas a él en el tiempo o en el espacio.
• La lectura estimula y satisface la curiosidad intelectual y científica.

La lectura permite entrar en contacto con gran cantidad de información, la importancia de estar informados y de ser personas independiente no tiene precio y la lectura nos los permite, así que es importante realizarla e interesarse por desarrollarla con técnica como la lectura rápida y la foto lectura para así ser lectores completos.

lunes, 12 de septiembre de 2011

Ser felices, lo prioritario para nuestros niños



Ser feliz, así como tener miedo, compartir, ser agresivo, entre otros, también se aprende y se hereda desde la más temprana edad. Los niños aprenden a ser felices cuando su entorno es feliz. Cuando, aún bebé, siente que les importa a sus padres, que hay comunicación con ellos, y que ellos atienden a sus balbuceos y a sus necesidades y derechos más básicos como el cuidado, la alimentación, educación, etc.

La felicidad va mucho más allá del tener, poseer,..., diría que reside en la ilusión, en el deseo y en lo que emplea un niño para conseguir lo que quiere. Si el niño que está a punto de soltar el dedo de sus padres para dar libremente sus primeros pasos, confía que puede contar con el cuidado de ellos, se sentirá feliz y conseguirá lo que se propone. A la hora de educar a nuestros hijos, son muchos los aspectos que consideramos y muchas veces dejamos de lado los sentimientos y sólo nos centramos en las buenas y malas conductas. Pienso que existen algunas claves que los padres pueden considerar a la hora de educar a niños felices.

Es importante establecer un canal de comunicación con ellos a través de actividades como el juego, el baile, el dibujo, la música, la cocina, o simplemente viendo una película o compartiendo un cuento infantil, una manualidad, una adivinanza.

Hay que enseñarles a aceptar sus frustraciones, de una forma constructiva y positiva. También tienen que aprender a perder. A través de los límites se puede enseñar a un niño sobre lo que es más o menos importante, y qué es lo que esperamos de ellos.

Es necesario que el niño exprese sus emociones y sus enfados,... No lo debemos reprimir. El niño puede generar inseguridad y miedo a mostrarse tal y como es. Debes enseñarle a respetar sus emociones, y buscar soluciones.

Hay que ensénale a compartir, a ser amigo, a ser responsable con sus cosas, a tener disciplina con sus tareas, etc. Estos valores son los que le quedarán para su vida adulta.

No lo compare con otros niños, amigos o hermanos. Acepte a su hijo tal y como es, con sus virtudes y defectos. Nadie es perfecto.

Las palabras tienen poder sobre los niños. Si estamos diciendo continuamente que él “es malo”, que “siempre hace todo mal”, lo que conseguiremos es bajar la autoestima, y no animarle a que se esfuerce para mejorar. Las malas palabras tienen un efecto al revés en los niños y en cualquier persona.

Enséñele a su hijo a ponerse en el lugar del otro. Que busque no hacer a los demás lo que no le gustaría que le hicieran a él.

Enséñele a su hijo a reconocer y a agradecer por todo lo que tiene, de corazón. Es importante que él sepa que es un niño privilegiado, que tiene unos papás que le quieren, una casa en que vivir, comida, escuela, amigos, salud,...que tiene tanto porque agradecer

Nuestros niños son niños felices y todo lo que hacemos va encaminado a ello. Sigamos juntos trabajando sobre ello.