viernes, 28 de agosto de 2015

Los hábitos de higiene


Los niños y niñas deben aprender desde pequeños los hábitos básicos de higiene, pues además de evitar el contagio de enfermedades, los mismos ayudan a los niños en su proceso de inserción social entre sus pares.

¿Cuándo comenzar a enseñarles?
Muchas veces los adultos pensamos que los niños pequeños no entienden muchas cosas que les decimos, pues como no se expresan mucho, nosotros nos encargamos de dejar para más adelante las enseñanzas de ciertos hábitos, “porque no entienden todavía”.
Pero es todo lo contrario; los pequeños entienden mucho más de lo que pueden expresar con palabras, por lo cual hay que introducirlo en los hábitos de higiene lo más pronto posible.

En los niños pequeños las rutinas diarias como cambiarle el pañal, limpiarlo al comer, lavarle sus manitas y cara, o bañarlo, les hace aprender que son hábitos indispensables.

¿Cuándo enseñar estos hábitos?
Lo ideal es comenzar lo más temprano posible. Se puede colocar un banquito frente al lavabo para que el niño pueda subirse en él y asearse las manos, cara, cepillarse los dientes y sentirse más alto, también será divertido.

También se puede colocar un espejo a la altura del pequeño para que pueda peinarse.

Hay que acostumbrar a los pequeños a lavarse las manos al regresar de la calle, después de ir al baño, antes de comer y antes de ir a dormir.

También acostumbrarlos a cepillarse los dientes y usar el hilo dental luego de las comidas y antes de dormir. El cepillado de dientes es algo que debe ser supervisado hasta que el niño pueda hacerlo bien solito.
Lo ideal es que las instrucciones que reciban los niños sean lo más simples posible. Y como ya dijimos, el ejemplo es la mejor manera de enseñar, todos en casa deben seguir los mismos hábitos de higiene y limpieza.